Consejos para tener una salud de hierro

1. ¡Tener interés! Lo acabas de demostrar al empezar a leer esto. Mantenelo hasta el último consejo.
2. Si te empezás a sentir cansada leyendo esto, andate a la cama, ya sabes que necesitas unas 8 horas diarias de sueño para recargar tu cuerpo.
   
3. Tené siempre un vaso de agua en tu mesita de noche y procurá tomar un mínimo de 8 vasos más a lo largo del día.
4. No te saltes nunca el desayuno, excepto cuando te despertes a las 12:00h. En este caso, pasa directamente a la comida.
5. Durante el desayuno, tomate tu tiempo para planear tu día. Un buen plan y organización te ayudarán a sacarle el mayor provecho.
6. Sonreí, reí, se feliz, no te lo tomes todo muy a pecho y disfrutá de la vida.
7. Tomá un complejo rico en vitaminas y minerales de alta calidad todos los días.
8. Si te sentís letárgica tras la hora de la comida, probablemente ingerís demasiados hidratos de carbono procesados. Procurá comer más hidratos de carbono complejos, añadí más proteína y fibra.
9. Recordá que cada gramo de alcohol contiene 7 calorías. Si tu objetivo es tener un estómago plano o perder peso, eliminalo de tu dieta.
   
10. Mantené una dieta equilibrada, baja en grasas, azúcar, sal y alimentos procesados y, rica en fibra y productos enteros/integrales.
11. Perder peso no es difícil. Mantenerte en tu peso ideal es lo que cuesta. El ejercicio y unos buenos hábitos alimenticios te ayudarán.
12. El ejercicio nos ayuda a mantenernos jóvenes al conservar y mejorar el tejido muscular y la densidad ósea. Cuanto más mayores nos hacemos, más importante es que realicemos ejercicio.
    
13. Si fumás, ¿por qué no lo dejas? Creo que no es necesario que te explique los efectos perjudiciales que tiene para tu salud.
14. Realizá ejercicios abdominales. Reforzar estos músculos previene los dolores de espalda baja en un 75%.
15. Mejorá tu postura. Siempre que estés de pie cerca de una pared, apoyá la cabeza, hombros y glúteos contra ésta y mantené la posición durante 20 segundos.
    
16. Comer grasa no es un problema, siempre que sea del tipo adecuado. Apostá por los ácidos grasos esenciales como el pescado y evitá las grasas hidrogenadas y saturadas.
17. Tras cada sesión de entrenamiento, recordá estirar los músculos para asegurar una recuperación más rápida.
18. Evitá los pensamientos negativos y no te menosprecies. Trabajá en fortalecer tu mente y tu cuerpo. Recordá que sos vos quien dice que no podes hacerlo. Poné fin a estas frases y convencete de que sí podes hacerlo.
19. Organizate y dedicá tiempo cada día para completar esas pequeñas, pero importantes, tareas que has dejado estancadas durante las últimas semanas.

¿Me ayudás? ¿Cuál es tu consejo personal para el resto de lectoras?