Mi visión de alimentación y ejercicio












Cuando empecé a pensar en alimentación y ejercicio como en partes de un estilo de vida, todo cambió para mí. Empecé a pensar en una alimentación sana y en actividad física, como medios para mejorar mi imagen y mi calidad de vida a corto y largo plazo. Fue crucial para mi dejar de asociar “alimentación” con “dieta” y con “pasar hambre”, y dejar de asociar “ejercicio” con “transpirar en el gimnasio para estar más flaca”.


Algo más que alimentación sana y equilibrada


Hace algún tiempo ya, me di cuenta de que alimentarse de forma sana y equilibrada me mantiene en mi peso ideal, y además me aporta la energía suficiente para estar activa todo el día, sin pasar hambre (como cuando estamos a dieta). La alimentación sana le da a mi piel un aspecto radiante y, además, evita los cambios bruscos de humor que normalmente tenemos cuando estamos a dieta.

Cuando descubrí todo lo que una alimentación sana me proporcionaba, entonces empecé a tener cada vez menos ganas de comer mal; empecé a tener cada vez menos ganas de consumir esos alimentos que sólo aportan calorías vacías, azúcar y aditivos… Además, me di cuenta de que seguía a raja tabla mi plan de alimentación sana, no sólo porque me ayudaba en mantenerme en forma, sino porque me resultaba superfácil de llevar a cabo.


Mantenerse en forma: fácil y divertido


El cambio en la manera de concebir el ejercicio físico también supuso un gran paso en mi vida. Decidí empezar a ir al gimnasio para divertirme, para mantenerme más sana, para ganar agilidad y tono muscular… Dejé de pensar en el gimnasio como en un lugar para sólo transpirar y perder peso, que es la visión que muchas mujeres tienen de hacer ejercicio.

Si hay una semana que no puedo seguir mi rutina de ejercicio, me aseguro de que la siguiente semana me recupero. Siempre intento mantenerme activa, dar un largo paseo o irme a correr o a andar en bici por el parque, porque sé que no sólo lo hago para bajar ese quilo de más, sino para tener un corazón más sano, para mantenerme en forma más tiempo, y para que en el futuro sea una viejecita muy activa y esbelta.

Te aseguro que pensando así, la alimentación y el ejercicio se convierten en algo mucho más llevadero. Por eso mi objetivo con éste artículo del día es “contagiarte” mi visión, para que empieces a cuidarte por dentro y por fuera, y para que a vos también te resulte mucho más fácil mantenerte en forma.

Todo cambio comienza desde el pensamiento. ¡Adelante!

No hay comentarios: